Uno de los principales atractivos de Talent Land es la oportunidad que representa para todos los emprendedores, jóvenes, desarrolladores, ingenieros, estudiantes, en fin, para todos los asistentes, de coexistir en un mismo espacio. Durante estos 5 días los salones de la Expo Guadalajara se visten de marcas, medios de comunicación, pero sobretodo de ideas y oportunidades.
Existe una zona en particular llamada Talent Makers que es donde la magia se produce y se presenta. En esta zona tuvieron lugar diversos talleres en los que se pudieron poner en práctica los conocimientos y la experiencia adquirida, así como llevarse a casa un poquito más de estos elementos.
Y fue aquí donde encontramos a Daniel Martínez Macedo, académico de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, que vino a presentar el prototipo de su proyecto titulado InteLentes.
InteLentes son lentes diseñados para apoyar a personas con debilidad visual, el objetivo principal que tienen es mejorar la calidad de vida, tanto profesional como personal, de los usuarios. Los lentes son capaces de identificar objetos y lo hacen a través de la toma de una fotografía de los mismos, reconocen rostros, lugares y texto.
En la entrevista que presentamos a continuación, Daniel nos contó las características generales de su trabajo y algunos detalles de la historia y los retos que se han dado para crear esta tecnología:
¿Qué te inspiró a realizar este proyecto?
Lo que me inspiró y motivó fue en mi trabajo. Uno de los temas importantes es que hay una persona con debilidad visual en recepción y un día trabajando logré hacer que con la cámara pudiera identificar cosas y me surgió la idea de hacer algo que pueda ayudar a ese tipo de personas y mejorar su calidad de vida.
Entonces, seguí trabajando y obviamente hubo muchos retos de por medio, pero mi inspiración fue poder generar algo que apoyara a un sector de personas dentro de la sociedad.
¿Cuánto tiempo tomó desarrollar la idea?
Alrededor de un año tres meses el desarrollarlo y la verdad es que no ha sido nada sencillo.
¿Cuáles han sido los retos más grandes para el desarrollo del proyecto?
Los retos más grandes son en el tema de integración tecnológica, porque ahí es por la parte de desarrollo de hardware y software. También un tema personal: el tiempo que he dedicado al desarrollo ha sido solo en fines de semana y por las noches o madrugada y a veces no es sencillo, termino muy cansado, pero la verdad estoy bastante satisfecho con lo que se ha logrado hasta ahorita.
¿Cuáles son los retos que se vienen?
Entre los retos que se vienen está el tema de inversión para poder fondear el proyecto y de alguna manera poder llevarlo a una producción en masa. Y dos, poder hacer el equipo de desarrollo para agilizarnos, de manera que pueda ver esto no sólo aplicado en México sino en toda Latinoamérica o en varios países alrededor del mundo.
La idea que nos presentaste ¿Siempre fue así?
La idea siempre ha sido así, pero a estas alturas puede que la idea cambie porque el objetivo de Intelentes o de Intevolution no es precisamente fabricar el armazón de los lentes, pero sí la inteligencia que esté adaptada en ellos, a mí se me ocurría que, tal vez, en algún futuro no sean unos lentes lo que se puedan vender, sino la inteligencia para que tú, a cualquier tipo de lentes, la adaptes y la puedas utilizar.
¿Cuánto tiempo te tomó emprender y qué le recomiendas a los jóvenes de Talent que quieren hacerlo?
Desde siempre he querido emprender. La verdad es que el trabajar para alguien más o en una empresa está bien, creo que es algo importante que todos deberíamos de pasar porque aprendes mucho, pero el tema de emprender es poder generar, sentirte parte de algo que es tu sueño, cumplir algo muy tuyo.
Y lo que le diría a los chavos o aquellas personas que quieren emprender es que de verdad se crean lo que quieren hacer. En México hay gente muy capaz, si fallas o te tropiezas, como me pasó y me ha venido pasando, no es algo que te deba detener. Si tienes bien claro, el objetivo, puedes cumplirlo, puedes llegar a ello.
Transcripción realizada por: Sebastián Silva
Editada por: Lorena Aguilar